Cuanto peor, mejor. Catarroja

Mariano Rajoy se hizo famoso por una lamentable frase que ha quedado acuñada para la historia: "Cuanto peor, mejor para todos y cuanto peor para todos mejor, mejor para mí el suyo beneficio político".

La Sra. Alcaldesa de Catarroja se hará famosa por cumplirla.

Se están produciendo actividades urbanísticas entre las poblaciones de Albal y Catarroja dentro del paso natural que recorrieron las aguas durante la barrancada del pasado 29 de octubre de 2024. En concreto, todas estas actuaciones se ceban sobre el trazado del paleocauce que llega hasta la Albufera y que pasa por la ermita de Sta. Ana.

A todas las actuaciones anteriores realizadas por el ayuntamiento de Catarroja, ya denunciadas en este blog, se le añaden las siguientes. 

Soterramiento

Aprovechando que la violencia de la corriente de las aguas desbordadas arrancó de cuajo a toda la arboleda que todavía se ve en la vista aérea, se ha procedido a soterrar TODO lo que quedaba de la Rambla de Pelayo, zona verde en la ortofoto anterior, desde el doble puente que soporta al Camí Real entre Albal y Catarroja hasta la calle La Font, en Catarroja y Lauria, en Albal. 

Comienzo de las obras de soterramiento de lo que antaño fue una rambla, tal y como hicieran antaño aguas arriba

Edificios en ruinas 

Tan significativo es lo que hace el ayuntamiento de Catarroja como elocuente es lo que no hace. Así, tenemos todavía el edificio donde estaba el restaurante "El anzuelo", antiguo restaurante "Arantxa 2", en las mismas condiciones en las que estuvo al día siguiente de la barrancada. Lo mismo podríamos decir de la caseta de transformación de media tensión a baja tensión aledaña.

Caseta de transformación de media a baja tensión junto al ex restaurante "El anzuelo"

 Parte trasera del ex restaurante "El Anzuelo" totalmente destruido tras la barrancada

Aquaparking mejor que el de Benidorm

Así mismo, el ayuntamiento de Catarroja tuvo la ocurrencia de peatonalizar calles en el casco viejo, en la zona conocida como “Les Barraques” y enviar a todos los coches que allí estacionaban al término de Albal, en un terreno catalogado como agrícola y que está situado oficialmente en el término de Albal. Antes de la barrancada, el terreno era diáfano y podía dar aparcamiento a unos 200 vehículos.

A los tres meses de ocurrir la DANA, el ayuntamiento de Catarroja ya estaba ordenando al ejército aplanar de nuevo el terreno con la clara intención de volver a poner allí a todos los coches de nuevo. Actualmente se ha agrandado para soportar hasta 350 y además se ha rodeado de una valla metálica cosida al suelo mediante soportes verticales efímeros. 

Sin pudor, se duplica la capacidad del solar donde se expondrán no 200, sino 350 coches al capricho del Poyo

Todos esos coches serán arrastrados, junto con los centenares de metros de valla de dos metros de altura, en la siguiente barrancada. Y junto con las toneladas de cañas e inmundicia que venga en la punta de la lengua de agua, formarán una estopa que taponará cualquier salida natural de aguas a la albufera, incluyendo la nueva mediana de la autovía V31, hasta entonces permeable.

Reconstruyendo  muros

Y por si no tuviéramos suficiente, alardeando de su sensibilidad ecologetista, en lugar de reconocer que el flujo de las aguas derribó los muros del parque de las Barracas, también conocido como el de los patos, y ceder el paso natural que buscaban las aguas, con el fin de eliminar cualquier muro que aumentara artificialmente la altura de inundación del barrio, va el ayuntamiento y no sólo no derriba el muro de hormigón, que no pinta nada en ese parque,

Muro de hormigón que no sabe nadie para qué está ahí 

sino que además, vuelve a reconstruir todo el muro de nuevo.

Docenas y docenas de metros de muro de bloques que remansan el agua en el barrio de les Barraques y que fue derribado por las aguas y vuelto a reconstruir sin miramiento

 


Parafraseando a Groucho Marx: Catarroja es una ciudad de muchas vallas, pero si no les gustan estas, tenemos más

Gradas y muro lateral precioso, recién reconstruido tras la barrancada 

Las gradas del estanque hacen un muro infranqueable de casi dos metros de altura y varios de gorsor, que junto con el más de un metro adicional arriba del todo, generan un límite perfecto para la evacuación de las aguas del barrio de las Barracas

Caseta de transformación eléctrica en mitad del barranco de Pelayo

Muro de las gradas que junto con la piscina al fondo, impiden el paso de las aguas de la barrancada a la Albufera


Desnivel enorme del muro sobre la vía del tren que en sí misma, también añade altura al paso de las aguas

Pero no es la única zona en la que hay desmanes urbanísticos. Cuestiones como la decisión de emplazar el "instituto provisional" de Catarroja construido a base de contenedores de obra acondicionados para la ocasión. A este tema, le dedicaremos un monográfico.

Y si creen  en Albal o en Massanassa lo están haciendo mejor, no lo crean.

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