Los Comités Locales de Emergencia y Reconstrucción, los CLER, afirman que son apartidistas, pero sus promotores, nunca han negado que tengan una marcada ideología. Los grupos con los que hacen piña reivindicativa y el lenguaje que gastan, les delata.
Su intención es loable dado que pretenden organizar la recuperación y afrontar los retos derivados de la barrancada. Pero la verdad, para ser una iniciativa popular, tienen una capacidad organizativa sospechosamente encomiable. Los CLER aparentan ser un movimiento que surge desde el pueblo de forma espontánea. Nada más lejos de la realidad. Los CLER son el instrumento desplegado por la izquierda de base combativa para capitalizar en beneficio político propio el malestar y el dolor producido por la barrancada del 29-O.
Y como no podría ser de otra forma, cuenta con el reconocimiento y el beneplácito de las alcaldías afines ideológicamente que encuentran en los CLER las coartadas perfectas para justificar sus políticas ya prestablecidas y dotarles de un brillo popular que es sólo apariencia, en un intento de congraciarse con el pueblo y lavar su imagen, muy deteriorada ya por su inacción y corresponsabilidad en todo lo ocurrido. Entre estas alcaldías, obviamente, está la alcaldía nacionalista-socialista Obrera Española de Catarroja. No confundir con Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán.
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