Pedid el perdón de vuestos pecados

 

El pueblo ha sido afrentado por sus dirigentes:

• Hemos sido ninguneados. Durante años se nos escamoteó el peligro en el que estábamos. Nadie nos advirtió de que estábamos en zona inundable. Nos vendieron pisos en zonas en las que no nos advirtieron de que corríamos un serio riesgo de perder nuestros enseres, coches e incluso nuestras propias vidas.
• Cuando llegó la barrancada,  no nos avisaron. Nos dejaron a nuestro libre albedrío mientras el agua subía velozmente, en cuestión de minutos, hasta cubrirnos por completo.
• Durante las siguientes horas, nadie vino a ayudarnos. Pasamos el primer día sin nadie que viniera a auxiliarnos. Al segundo día sólo llegó un par de cubas con agua del grifo para poder beber algo.
• No comenzamos a ver policía local, bomberos y camiones hasta el tercer día. Y lo que hacían era pasearse y tomar notas mientras los vecinos no parábamos de trabajar para desalojar enseres inservibles, lodo, barro, maleza, porquería que nos había traído la inundación de nuestras casas.
  

Si queréis nuestro perdón, tenéis que pasar por un proceso de redención que consta de cinco pasos:

1. Que reflexionéis sobre lo que habéis hecho mal, sobe lo que podrías haber hecho mejor y sobe todo, POR LO QUE NO HICISTEIS; por vuestra tardanza deliberada en actuar, por la omisión de socorro, por vuestra negligencia fruto de vuestra ineptitud; de vuestra incapacidad en gestionar una situación para la que no estabais preparados y que os venía muy grande para las competencias que habéis demostrado.
2. Que seáis conscientes del dolor que habéis causado y del mal que vuestras prioridades ideológicas nos han ocasionado. No habéis estado a la altura. Sabemos que la psicopatía de algunos de vosotros no os permitirá tener empatía con nosotros, pero recorrer a pie las calles para enterarse en primera persona de todo el dolor que habéis causado os ayudaría.
3. Queremos que confeséis públicamente todos los fallos que habéis tenido, que pidáis nuestro perdón por vuestra soberbia.
4. Queremos que se rehagan los protocolos de seguridad a raíz de las torpezas cometidas.
5. Queremos que que comiencen las obras de canalización de avenidas YA, no el año que viene. Queremos dimisiones. Queremos restructuración de TODOS los servicios públicos que tienen algo que ver con este desastre. Queremos que se dejen de pendejadas autonómicas o estatales y se hagan organismos transversales que tengan competencias directas, sin cortapisas burocráticas.

Lo que hay que recuperar es el terreno que NUNCA deberíamos haber robado a la naturaleza. El verdadero ecologismo no reside en apropiarse de la voz de la Naturaleza para defender a unas cañas. En cuanto "habla" la naturaleza, se las quita de encima de los lechos de los ríos y las deja abandonadas en kilómetros y kilómetros de playas mediterráneas como un perro se quita las gotas de agua tras salir del agua.

El verdadero ecologismo comienza por hacer un acto de humildad, pedir perdón a la gente que también formamos parte de la Naturaleza. Es más, estamos en su cúspide y somos los únicos que podemos pedir perdón. Los animales y el resto de plantas, soportan el daño y sobreviven como pueden.

Es momento de reconocer los errores propios y devolver a continuación los terrenos robados a sus cauces naturales. La reconstrucción de les Barraques comienza por la reconstrucción de la rambla de Pelayo. Porque camino de cuatro meses después, seguimos con el culo al aire.

La reconstrucción de la avenida Rambleta comienza con la construcción de otra rambla, protegida para siempre, en la que nunca se pueda edificar y que nos proteja como pueblo de la siguiente barrancada.

Y, por supuesto, alguien tendrá que dimitir si quiere ser recordado con un mínimo de dignidad. Alguien tendrá que asumir sus errores. Alguien tendrá que decir que no lo hizo todo bien y que parte del daño se pudo haber evitado si hubiera actuado de otra manera. ALGUIEN.

Porque si nadie dimite, el pueblo hablará. Y seréis expulsados a patadas por medio de las urnas. Y seréis recordados para siempre... pero no de la manera que a vosotros os gustaría.