Fauna salvaje de Catarroja. Luto Iaculator

La barrancada del 29 de octubre de 2024 bañó con sus aguas fecundas, centenares de kilómetros cuadrados de uno de los páramos más fértiles de la vega valenciana. Aguas llenas de nutrientes generosamente repartidos por doquier.

Al albur de unas temperaturas amables, comenzaron a florecer plantas que creíamos ya extintas, pero cuyas semillas yacían agazapadas, esperando que se dieran las condiciones adecuadas para desarrollarse y florecer, en todo su esplendor. Muchas especies comenzaron a pulular por doquier. Entre ellas, en esta entrada se destaca al Luto Iaculator.

 

El Iaculator es un espécimen de naturaleza generosa que suele compartir todo aquello que posee de manera desinteresada y que, sinceramente, estaría dispuesto a quedarse ciego por ayudar a un tuerto.

En los días posteriores a la riada, nuestro amado líder supremo, el Dr. Sánchez, junto con otras autoridades nacionales, se dignó a abajarse a compartir, por unos efímeros instantes, su entrañable presencia en aquellos territorios amigos, regidos por alcaldesas socialistas (Paiporta y Catarroja). A Catarroja ya no pudo acudir, compungido por los excesos del Iaculator.

Dio la casualidad de que, por aquellos lares de Paiporta, pululaban ufanos bastantes Iaculators que, a la sazón, comprendiendo la importancia de tan magna visita, no dudaron en hacer gala de su generosa naturaleza. Y por ello, habiéndolo perdido todo y, no teniendo nada más que compartir, se aprestaron a entregar a nuestro amado líder supremo todo aquello que les quedaba: Caña y Barros. Todo un homenaje sincero del que nuestro amado valenciano Vicente Blasco Ibáñez bendeciría orgulloso desde el más allá y que seguro habrá recogido en un breve escrito celestial. Escrito que, el también valenciano Luís García Berlanga, no dudaría en solicitar los derechos de autor para crear una nueva producción a la que denominaría “Bienvenido Dr. Sánchez”.

El galgo inmaculado en plena carrera

El pueblo agradecido, viendo la esbeltez, porte y agilidad con la que eludía el Luto de una forma tan insigne y digna, no dudó en apodarle cariñosamente como el Galgo de Paiporta.

-------------------

Esta entrada corresponde a un fragmento de uno de los capítulos que forman parte del libro "CORAZONES DE BARRO (Relatos de la Dana)" editado por la editorial Vinatea. Se puede adquirir por un módico precio y los beneficios devengados de la obra se dedicarán a la ayuda a los DANIficados (Damnificados por la DANA del 29 de octubre de 2024) a través de la Fundación Vinatea Editorial.

Comentarios